Magistrado Orlando Aguirre Gómez

En el marco de la apertura de este nuevo Año Judicial 2020, siempre es un motivo de satisfacción reconocer el esfuerzo realizado por todas las personas que a través de sus distintas funciones hacen realidad la misión del Poder Judicial, base de nuestra democracia y garante del Estado Social de Derecho.

Brindamos un servicio público que debe ser de calidad y con un sentido humanista, con el fin satisfacer la demanda de las personas usuarias del sistema judicial. Dentro de este contexto, la base fundamental para alcanzar tal objetivo es contar con un recurso humano dedicado y comprometido.

La pandemia del Covid-19, es uno de los retos más significativos para el servicio público de Administración de Justicia que el Poder Judicial ha debido atender en su historia moderna; sin embargo, se han redoblado los esfuerzos para mantener la continuidad del servicio de calidad a las personas usuarias.

Ante tal desafío, la respuesta de todo el personal judicial, en el territorio nacional, refleja un alto grado de identificación con los valores institucionales en medio de la emergencia sanitaria. No es hora de reclamar ventajas y mucho menos de obtener ventajas a raíz de la crisis, sino hora de entregarnos todos, desinteresadamente, en procura de salir adelante.

Este sentido de pertenencia del recurso humano que caracteriza al Poder Judicial permite mirar con esperanza el futuro, teniendo como norte un servicio de excelencia con rostro humano, en apego a principios éticos y morales suficientemente fuertes para que la institución siga siendo lo que ha sido siempre y siga constituyéndose en pilar fundamental de nuestra sociedad. No nos amilanemos antes la oscuridad. Parafraseando a un conocido poeta e intelectual costarricense, esto es señal de que pronto amanecerá.

Este acto reviste gran trascendencia, dado que, se pretende resaltar el trabajo de personas funcionarias judiciales que se han destacado por el compromiso en la ejecución de sus labores, convirtiéndose en referentes para el personal de la institución y evidenciando la excelencia. Hay muchas personas servidoras judiciales merecedoras de un reconocimiento como el que hoy se hace, pero hemos tenido que escoger y lo hacemos en el entendido de que las personas que hoy van a ser galardonadas, son dignas representantes de ese conglomerado.

En mi condición de coordinador del Tribunal de Reconocimientos del Poder Judicial, les manifiesto que en la sesión de Corte Plena N° 11-20 de 9 de marzo del año en curso, se analizó la recomendación del Tribunal de Reconocimientos del Poder Judicial a la luz del “Reglamento de Reconocimientos Otorgados por el Poder Judicial”; y se acordó otorgarlos a las personas que de seguido me permito presentar:

1. “Reconocimiento Ulises Odio Santos”. Según los artículos 22 y 23 del Reglamento este reconocimiento se otorga al autor o la autora que hubiese publicado un trabajo, artículo o escrito en general de utilidad y trascendencia para el Poder Judicial. Considerando su novedad, su actualidad, el valor científico de la contribución, su relevancia teórica o práctica, su fundamentación doctrinal y el aporte que represente para la vida jurídica nacional. Se dispuso otorgar el reconocimiento al LICENCIADO JUAN PABLO SALAZAR CARVAJAL, Profesional en Derecho de la Sala Primera, quien se ha desempeñado por más de 20 años en el Poder Judicial. Don Juan Pablo cuenta con una maestría en lexicografía hispánica por la Universidad de León de España. Se ha destacado como editor, periodista, lexicógrafo y abogado. Se le nominó para este premio por su obra denominada “Diccionario Usual del Poder Judicial”, que resulta una obra novedosa y permite llenar un vacío en las herramientas con las cuales las personas servidoras pueden contar para realizar sus tareas en el quehacer jurisdiccional. También resulta de utilidad para la ciudadanía en general. Dicho escrito cuenta con el reconocimiento de la Real Academia Española y la Academia Costarricense de Lengua. La obra de don Juan Pablo, fue destacada por el Consejo Superior como una obra de interés institucional. Además, indudablemente genera un impacto positivo para el Poder Judicial y la cultura jurídica del país.

2. “Reconocimiento Luis Paulino Mora Mora. Al Buen o la Buena Profesional”. De conformidad con el numeral 25 del Reglamento, este galardón está destinado a la persona que, por su quehacer profesional, en cualquier área del conocimiento hubiese influido o influya en el mejoramiento de la administración de justicia, a nivel nacional, haciendo posible su eficiencia y el acceso de las personas ciudadanas al servicio de la justicia. Digna de este reconocimiento, es la DOCTORA GRETTCHENG FLORES SANDÍ, quien presta servicios desde hace más de 27 años en el Poder Judicial. Actualmente labora en la Clínica Médico Forense. Se ha desempeñado como docente por 25 años en la Escuela de Medicina de la Universidad de Costa Rica, en donde dirige la Especialidad en Medicina Legal. La doctora Flores se ha destacado por la disciplina y la persistencia con que diariamente realiza su trabajo. Como parte de su entrega, contribuye como médico especialista del Departamento de Medicina Legal en la formación de las futuras generaciones de las personas profesionales en medicina. Además, asumió la responsabilidad de la redacción y el seguimiento del Convenio de Cooperación Interinstitucional entre la Universidad de Costa Rica y el Poder Judicial, para la formación de las doctoras y los doctores, especialistas en medicina legal.

3.- Reconocimiento Miguel Banco Quirós. Al Buen Servidor/a Judicial”. Este galardón está previsto en el artículo 29 del Reglamento, para la persona empleada judicial, en puesto no profesional, que en el desempeño de sus labores se haya destacado por su honradez, mística, transparencia, excelencia y dedicación al trabajo; y que con su actitud hubiese enaltecido al Poder Judicial. Dichas cualidades se han apreciado en el cumplimiento de las funciones de la señora LILIAM GARITA SHARPE, quien labora como Coordinadora Judicial 2 del Juzgado de Familia del Primer Circuito Judicial de la Zona Atlántica. Doña Liliam ha laborado para la institución por más de 25 años. Se ha destacado por ser una persona colaboradora, con iniciativa, honrara y dedicada a sus funciones. Con su actitud ha exaltado los valores de la institución.

Estimadas compañeras y estimado compañero, gracias por su dedicación y compromiso, siempre en procura del mejoramiento de la Administración de Justicia.

Sabemos que, muchas personas siguen esos pasos y llevan sobre sus hombros el gran peso de mantener el servicio público de calidad, en aras de mejorarlo siempre. A ellas, les damos nuestro más sincero agradecimiento y les exhorto a continuar con la excelencia y la calidad en la atención de las personas usuarias, lo que resulta necesario para aspirar al cumplimiento de una justicia pronta y cumplida.