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10 de junio de 2015 - Edición 183 - Año 11
Así informó la Prensa Otras Ediciones Contáctenos Créditos
Polígono de tiro
¡Ganar la lucha contra la criminalidad genera
motivación en cada práctica!
  • Campo de tiro alberga prácticas y capacitaciones, así como otras actividades como pericias físicas de Medicatura Forense
  • Instalaciones se ubican en la Ciudad Judicial en San Joaquín de Flores, en Heredia
  • Erick Fernández Masís
    Periodista

    Mantener a la población segura, poner un alto en el camino al crimen organizado, demostrar que el Poder Judicial está capacitado para hacer frente a la delincuencia que ataca nuestro país, son las consignas de los y las agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y demás dependencias que utilizan las instalaciones del campo de tiro o polígono judicial.

    Estas instalaciones se encuentran ubicadas en la Ciudad Judicial en San Joaquín de Flores, en Heredia, y es donde se realizan las diferentes actividades de práctica y capacitación del manejo de armas, con el objetivo de especializar a los y las responsables de esta tarea tan delicada.

    La recreación de ambientes simulados, el trabajar en situaciones de extrema presión bajo las condiciones que reinan en las calles, el manejo de las armas a las que tiene acceso el hampa y la exposición a situaciones que ponen en riesgo la vida permanentemente, son aspectos que se trabajan en este espacio, de vital importancia para la lucha en favor de la seguridad de los costarricenses.

    Gerald Campos Valverde, Subdirector del OIJ, resalta la importancia del campo de tiro para las funciones de los agentes judiciales. “Para la Policía Judicial, es de suma importancia contar con un polígono de tiro, ya que esto nos garantiza el poder hacer uso de instalaciones adecuadas para una importante formación inicial en el uso y manejo de armas de fuego, donde sin lugar a dudas, el servidor de primer ingreso comenzará no sólo a aplicar los conceptos tácticos adecuados para cada uno de los escenarios, sino que a su vez contará con todas las medidas de seguridad para ello”.

    Agregó que “con el polígono de tiro se le permite a los actuales agentes ir perfeccionando sus habilidades en el manejo de las armas de fuego, por medio de la realización de prácticas supervisadas, y así evitar en la medida de lo posible, que se puedan cometer errores”.

    Imágenes de agentes judiciales desarrollando su labor. Foto archivo

    Para Guillermo Mata Vargas  y Bryan Meneses Rodríguez instructores en armas de fuego del Poder Judicial, este espacio es muy importante, ya que el alcance que tiene el crimen organizado en cuanto a armas de alta capacidad, obliga a la institución a estar bien capacitada para poder hacer frente a estas organizaciones.

    “Siendo que el personal de investigación del Organismo de Investigación Judicial y Unidades Especializadas realizan constantes operaciones policiales que finalizan con la detención y enfrentamiento de grupos del crimen organizado, surge la necesidad de preparar a todas estas unidades en el uso táctico de diferentes armas de fuego que puedan hacer frente a este tipo de amenazas, que implican actos de violencia por parte de las organizaciones criminales”, dijo Mata Vargas.

    Por su parte, Meneses Rodríguez señala que “es de suma importancia el uso que se le da a las instalaciones del polígono de tiro, donde se efectúan varios ejercicios que simulan situaciones ambientadas que afectan la labor del investigador, tales como disparar bajo lluvia, condiciones de estabilidad en donde se ejecutan ejercicios de disparo sobre suelos lodosos e inestables, ejercicios físicos con chalecos anti-bala u otros equipos básicos, como arrastrar sobrepesos y pruebas de stress”.  

    Lo anterior es primordial, ya que la capacidad de respuesta que tenga el personal operativo, para hacer frente a la delincuencia organizada, depende de los conocimientos, habilidades y destrezas que puedan adquirir los participantes durante estas formaciones.

    El polígono es de suma importancia para fortalecer y desarrollar nuevas destrezas en el uso de armas de fuego.

    Es por ello, que la Corte Plena, en sesión Nº11-08, celebrada el 7 de abril del 2008 aprobó el “Reglamento de organización y uso del Campo de Tiro del Poder Judicial” con el fin de establecer las condiciones y parámetros para la correcta utilización de este espacio en beneficio de la institución.

    A partir del reglamento, tanto el OIJ como la Escuela Judicial utilizan el polígono para desarrollar prácticas dirigidas, cursos, pericias físicas, pruebas de chaleco y pruebas de funcionamiento de armas, entre otras.

    En ese sentido, Carlos Chaves Sandí, encargado del polígono subraya que “el mayor usuario del campo de tiro es la Escuela Judicial, ya que se utiliza mucho para cursos de adiestramiento y especializaciones, pero de igual manera es usado por las distintas unidades del Organismo de Investigación Judicial para sus diferentes prácticas de disparo”.

    En el caso de las prácticas, éstas se realizan dependiendo de la funcionalidad de las operaciones en las que se encuentren las unidades en los determinados momentos.

    Chaves Sandí indicó que “cada una de las prácticas es diferente, y éstas dependen del diseño curricular que tengan, debido a que hay distintos tipos, entre ellos: tiro de precisión, práctica de reacción, prácticas de tiro en movimiento, prácticas de diversas posiciones de tiro, así como de cambio de cargador por mencionar algunas”.

    Por otra parte, en el caso de las capacitaciones o cursos brindados por la Escuela Judicial, se trabaja con un plan anual de capacitaciones, y es esa misma dependencia la que provee los instructores para las actividades que se vayan a realizar.

    Dentro de la utilidad del polígono, también se realizan pericias físicas por parte de la Unidad de Medicatura Forense, además, se hacen pruebas de armas en el campo de tiro según lo soliciten las autoridades judiciales, esto cuando son armas decomisadas como evidencia, se verifica su funcionamiento y se busca determinar el efecto de las municiones en ciertos materiales, tales como madera, lata, entre otros.

    En materia de seguridad, el polígono tiene rotuladas o demarcadas las zonas de acceso al lugar, así como el área de disparo, las líneas de tiro, áreas permitidas y restringidas, rotulación de oficinas, información sobre reglamentación, orientación y cualquier otro servicio de índole básico que el lugar brinde, como por ejemplo agua, teléfono, iluminación, servicios sanitarios, duchas y estacionamientos.

    Generalidades del campo de tiro

    El campo consiste en un terreno que a un mismo nivel se divide en dos campos o zonas simétricamente iguales, denominadas zonas A Y B, en donde se realizan las actividades de disparo, cada zona mide 15 metros de ancho.

    El polígono cuenta con un sistema de astas con su respectiva bandera color rojo, colocadas en el perímetro y zona externa del campo de tiro y en un lugar visible, con el fin de fungir como aviso a las personas que se encuentren en los alrededores. Si el polígono está en uso, las banderas están izadas, es decir, que en ese momento hay actividad y se debe tener precaución.

    Para poder hacer uso del campo de tiro, cada uno de los o las involucradas deben contar con el equipo de seguridad básico, el cual es suministrado por el encargado del campo, y que consiste de lentes de protección y las orejeras. Dependiendo de la práctica, se debe utilizar un chaleco antibalas.

    Imagen panorámica de las áreas de entrenamiento.


    Las pistolas y las municiones de calibre 9mm, son de uso común en el polígono.

    Basado en el reglamento aprobado por la Corte Plena, se pueden utilizar las siguientes armas: revólveres, pistolas, escopetas y subametralladoras cuyos proyectiles no alcancen una velocidad mayor a los 600 metros por segundo. De lo anterior se hace la excepción de las carabinas, rifles o fusiles, pero su utilización se limitará únicamente al céreo de las miras del arma, pruebas balísticas, peritajes de cualquier tipo y pruebas por parte del armero del OIJ.

    Las municiones permitidas son calibre .22, .25, .32, .380, 9mm, .38, .357, .45, .38 súper, .40, 10mm que tengan la punta de bala cortada, redonda o semiredonda, expansiva y otras similares, siempre y cuando no sean disparadas por armas que provoquen un efecto de velocidad mayor a los 600 metros por segundo.

    En el caso de las prácticas o capacitaciones, el Reglamento estipula que se utilizarán preferiblemente siluetas o blancos de tiro usados comúnmente por la policía, hechos por materiales comunes como por ejemplo, papel, cartón o plástico.

    Las distancias de tiro del polígono son de: 3, 5, 7, 10, 15, 20 y 25 metros, las distancias de 30, 40 y 50 metros son de uso restringido y se utilizarán solo cuando el instructor de tiro lo estime pertinente y se hayan comprobado las medidas de seguridad necesarias.

    Equipo de seguridad básico y objetivos utilizados en las prácticas del polígono judicial.

    De esta forma, el Poder Judicial continua trabajando de manera comprometida con la población costarricense, con el objetivo de luchar por un país más seguro y tranquilo para sus habitantes.

    Este Poder de la República mantiene su fuerte empeño por mejorar a diario, para continuar atento a todos los movimientos de quienes quieren robar la paz de nuestra sociedad, y así hacerles frente con mano dura.

    Amigable con el ambiente

    Un aspecto destacable, es que en el campo de tiro también se hace consciencia en lo que respecta a los desechos, por lo que se cuenta con recipientes para reciclaje de materiales como cartón y los residuos de las municiones, en este caso los casquillos que quedan esparcidos en las zonas de prácticas.

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