Parámetros para ajuste debe definirlos el Consejo de Transporte Público Riteve anuncia que proseguirá en sus gestiones para que suba el monto.

La Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) no está obligada a aumentar el costo de la revisión técnica vehicular mientras no exista un modelo tarifario.

Así lo determinaron los magistrados de la Sala IV al rechazar un recurso de amparo interpuesto por Riteve SyC.

La empresa encargada de verificar el buen estado de los automotores pretendían, con ese alegato, obligar a la Aresep a actualizar las tarifas, que están vigentes desde el 2004.

El recurso lo presentó Riteve luego de que la Autoridad Reguladora le rechazara dos peticiones de incremento en el último año, que oscilaban entre el 14% y 69% y que se traducirían en montos que van de los ¢1.400 a ¢6.500.

“Para hacer la fijación de tarifas a Riteve se debe contar con metodología que, de acuerdo a la ley, debe ser emitida por el Consejo de Transporte Público (CTP)”, recalcó Dennis Meléndez, regulador general.

Por su parte, Riteve anunció que proseguirá con las gestiones para lograr el aumento.

“La empresa es respetuosa de la institucionalidad del Estado de derecho y acudirá a las instancias que sean pertinentes”, dijo Berlioth Herrera, vocera de Riteve.

Entre tanto, Mario Bonilla Apuy, director ejecutivo del CTP, no atendió las consultas por teléfono y pidió que se le enviaran por correo electrónico; no obstante, tampoco las contestó.

Origen. Para actualizar el precio que les cobra a los usuarios, Riteve planteó dos escenarios.

Uno contempla solo el alza en los costos de operación en el período de setiembre del 2008 a la fecha.

Si esa petición era avalada, entonces el alza sería del 14% (¢1.400 adicionales a la tarifa actual).

El segundo era lograr que la Aresep le reconociera el costo de operación de las estaciones de revisión técnica entre los años del 2004 al 2010.

Si eso hubiera sido aceptado, los dueños de vehículos tendrían que pagar un 69% más por la revisión, lo que hubiera significado ¢6.500.

Ahora el dueño de un vehículo particular con peso inferior a 3,5 toneladas paga ¢9.930 por la inspección. Riteve plantea que ese costo sea de ¢11.330 o ¢16.430, según el escenario que sea aprobado.