Momento en que el magistrado Jesús Ramírez juramentó a
Orlando Aguirre como nuevo presidente de la Corte Suprema de Justicia. (Foto:
Poder Judicial)
Orlando Aguirre asume Presidencia de la Corte con el
compromiso de defender la independencia del Poder Judicial
Por Vinicio
Chacón | vinicio.chacon@ucr.ac.cr
26 septiembre, 2022
Luego de 18 rondas de votación y
tras el retiro de Luis Fernando Salazar, el magistrado presidente de la Sala II
logró el mínimo de 12 votos.
“Bandera
de mi presidencia será la defensa de la integridad del Poder Judicial y, como
consecuencia de eso, la defensa de la independencia judicial”, fueron algunas
de las primeras palabras que, ya como presidente de la Corte Suprema de
Justicia, pronunció el magistrado Orlando Aguirre.
Hasta
ahora presidente de la Sala II, que ve temas laborales y de familia, Aguirre no
había pasado de un solo voto en muchas de las 15 rondas de votación realizadas
antes de la sesión de este lunes. Sin embargo, la jornada inició con la
sorpresiva decisión del magistrado Luis Fernando Salazar de retirar su
postulación.
Salazar,
magistrado de la Sala Constitucional quien en varias rondas precias había
quedado a un sólo voto del triunfo, informó antes de que se votara de que, en
vista de que la votación no sería pública, de que “más allá de intereses
personales está el Poder Judicial” y de que “no podemos posponer más la
elección, debemos ser céleres y eficientes”, había tomado la decisión de hacerse
“a un lado con la finalidad de despejar el camino”.
Ese
camino despejado significó que prácticamente todo el apoyo por él conseguido
fue a dar por la opción de Aguirre, quien logró el triunfo en la cuarta y
penúltima ronda de votación de día.
El
nuevo Presidente de la Corte Suprema de Justicia en su primer discurso pidió a
Dios “que nos de sabiduría a todos, ánimo y sobre todo entereza” para abordar
temas “de gran trascendencia, sobre todo para el principio de independencia que
tendremos q tratar aquí en los próximos tiempos”.
Consciente
de las divisiones que el proceso ha causado en el seno de la Corte Plena,
Aguirre pidió a sus compañeras y compañeros que “pasemos la página de lo que ha
sucedido”, sobre todo ante la apremiante atención de problemas, “algunos
inmediatos como recortes sustanciales de presupuesto, porque tocan partidas muy
sensibles como la alimentación de los detenidos”.
Tras
manifestar gratitud hacia sus contrincantes, Aguirre subrayó la necesidad de
que se realice una reforma constitucional para “objetivizar
la elección de magistrados, ese es el punto central para poder hablar de una
verdadera independencia judicial”.
Aguirre
también mencionó la necesidad de “descongestionar” la Corte de asuntos
administrativos e incluso de una posible reestructuración del aparato
administrativo y de “toda la organización del Poder Judicial”.
Dijo
que con su elección se abre una “nueva página para comenzar a escribir un
futuro mejor para el Poder Judicial”.
Entre
las intervenciones que se dieron tas las la elección figuró al de Patricia
Solano, actual vicepresidenta de la Corte y quien también aspiró al puesto. La
magistrada presidenta de Sala III lo felicita y expresó que “hubiera querido
que el voto fuera público”.
Solano
destacó que la transparencia es un de los desafíos
señalados pro el Estado de la Justicia, “mucho
hubiéramos andado y señalado la país si se hubiera logrado ese fin de la
votación pública”. Sin embargo, aseveró que “creo en su probidad y eso me hace
celebrar su designación”.
Un
juez de carrera
Aguirre inició su
carrera como juez desde 1976. (Foto: Poder Judicial)
El
abogado constitucionalista y profesor emérito de la UCR, Walter Antillón,
conoce bien a Aguirre y lo describió como un hombre “serio y estudioso”.
Recordó
que Aguirre trabajó en el Poder Judicial desde sus años de estudiante y
“continuó como juez, toda la vida, es un juez de carrera. Creo que es un hombre
honesto, buen trabajador y responsable en su cargo”.
En
efecto, Orlando Aguirre en 1976 inició su carrera como juez contravencional y
de menor cuantía de Aserrí. Poco a poco fue subiendo puestos y llegó a ser juez
superior civil de San José, entre 1983 y 1989, año en que llegó a ser
magistrado de la Sala II.
Además
ha destacado como profesor de derecho en la UCR y otras instituciones.
Antillón,
galardonado con el Premio Rodrigo Facio Brenes 2022, consideró que la de
Aguirre es una “buena elección” por parte de la Corte, pues “es de los
magistrados que tiene una experiencia probada, es un hombre transparente”.
Ante
la pregunta de si Aguirre está bien posicionado para llevar a cabo la defensa
de la independencia del Poder Judicial, tal como ha prometido, Antillón destacó
su experiencia y que “tiene muy claro el problema de la Corte en relación con
su independencia, que es el problema de la intervención de los políticos a
través de nombramientos que han dirigido, que la Asamblea Legislativa ha
realizado siguiendo instrucciones de políticos, pero Orlando no fue electo de
esa manera y está muy consciente del problema que la Corte ha tenido respecto
de esa intromisión de los políticos”.
El
abogado además calificó como “una calamidad” que la elección fue secreta, dijo
que esa forma de votar normalmente ha funcionado como “la manifestación de la
intervención política”, celebró que el proyecto de ley que le pondría fin
“parece muy bien encaminado” y recalcó que “dichosamente con ese voto secreto
salió Orlando”.
Voto
secreto
Sin
duda, la realización de la votación en secreto fue un tema álgido a lo largo de
todo el proceso de elección de la Presidencia de la Corte.
Al
final la mayoría de magistrados y magistradas decidieron mantenerla pues así lo
manda el artículo 41 de la Ley Orgánica del Poder Judicial. Sin embargo se dio
una polémica pues la Sala Constitucional acogió para estudio recursos de amparo
presentados por organizaciones gremiales del Poder Judicial, como el Sindicato
de la Judicatura (Sindijud) o la Asociación
Costarricense de la Judicatura (Acojud).
En
vista de ello se defendió la tesis de que el proceso debía suspenderse para dar
chance a que la Sala Constitucional decidiese al respecto, defendida con mucha
vehemencia por las magistradas Julia Varela y Sandra Zúñiga. En favor de la
votación secreta intervinieron las magistradas Iris Rocío Rojas y Roxana
Chacón.
Cabe
destacar así que en dos oportunidades la Corte Plena votó 12 votos contra 10
por mantener la votación secreta. De las cinco personas que originalmente
presentaron sus candidaturas, sólo Roxana Chacón apoyó el voto secreto.