Sala IV da luz verde a ley contra acoso callejero: s’ es posible
juzgar Ôsilbidos, jadeos y gemidosÕ
Resoluci—n
da paso a que sea votado en segundo debate el proyecto que tambiŽn castigar‡
actos como el acorralamiento, la persecuci—n, el exhibicionismo y la
masturbaci—n en sitios pœblicos
< El proyecto contra el
acoso callejero ya puede ser votado en segundo debate. Foto: Rafael
Pacheco"/> El proyecto contra el acoso callejero ya
puede ser votado en segundo debate. Foto: Rafael Pacheco
La Sala IV no encontr—
vicios de inconstitucionalidad en los art’culos del proyecto de ley contra el
acoso sexual callejero que un grupo de diputados someti— a consulta de este
tribunal.
Esta resoluci—n abre
el camino para que sea aprobado en segundo debate, y pase a convertirse en ley
de la Repœblica, el texto para castigar con multas conductas como los silbidos,
los jadeos y gemidos emitidos con connotaci—n sexual, sin consentimiento de la
v’ctima.
Adem‡s, se impondr‡n
penas de c‡rcel por actos como el exhibicionismo y la masturbaci—n en espacios
pœblicos o en medios de transporte, as’ como la persecuci—n o acorralamiento de
una persona.
La resoluci—n de los
magistrados evacua una consulta facultativa presentada por 12 diputados, los
cuales alegaron que el tŽrmino utilizado para definir el acoso sexual callejero
violentaba Òlos principios de tipicidad y legalidad penal, al contener, en su
criterio, tipos penales abiertos y sujetos a criterios de interpretaci—n
subjetivosÓ.
Estos legisladores
tambiŽn argumentaron que es imposible juzgar a las personas que emitan ruidos,
silbidos, jadeos, gemidos, gestos o ademanes; argumentaron que no hay forma de
que un juez o una jueza pueda tener certeza absoluta de la intenci—n, prop—sito
u objetivo con que se realizaron, pues el sentido depender‡ de la persona
afectadaÓ.
Al respecto, la Sala
IV resolvi—, por unanimidad, que los aspectos consultados por los diputados
Òdistan de ser contrarios a la Constituci—n Pol’tica, y los valores y
principios que la integran, pues son en realidad conceptos definidos y
socialmente comprendidos, cuya aplicaci—n en cada causa o proceso
depender‡, en definitiva, de la valoraci—n que realice la persona juzgadora con
base en todo el material probatorio con que se cuente en cada caso concretoÓ.
El proyecto de ley
prevŽ una pena de 15 a 30 d’as multa a quien, en un espacio pœblico, de acceso
pœblico o en un medio de transporte remunerado de personas, profiera, dirija o
ejecute, con connotaci—n sexual, palabras, ruidos, silbidos, jadeos, gemidos,
gestos o ademanes hacia otra persona, sin su consentimiento.
La pena ser‡ de 25 a
35 d’as multa si esas conductas son cometidas por dos o m‡s personas, o
mediante el uso de medios electr—nicos.
La consulta a la Sala
IV fue firmada por seis diputados de Restauraci—n Nacional (PRN). Se trata de
Carlos Avenda–o, Geovanni G—mez, Melvin Nu–ez, Xiomara Rodr’guez, Mileidy
Alvarado y Floria Segreda.
TambiŽn firmaron
cuatro legisladores del Partido Liberaci—n Nacional (PLN). Son: Luis Antonio
Aiza, David Gourzong, Jorge Fonseca y Paola Valladares.
Adem‡s, apoyaron la gesti—n
un congresista del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), îscar Cascante; y
uno del Partido Republicano Social Cristiano (PRSC), Otto Roberto Vargas.
La iniciativa tambiŽn
establecer‡ las siguientes penas:
-De diez meses a un
a–o y medio de c‡rcel: a quien fotograf’e o grabe con connotaci—n sexual, y
sin su consentimiento, a personas en lugares de acceso pœblico y en servicios
de transporte remunerado de personas. La pena podr’a subir hasta dos a–os de
c‡rcel si el material es mostrado o transmitido a otra persona.
-De seis meses a un
a–o de c‡rcel: a quien se masturbe o exhiba sus genitales con intenci—n
sexual en pœblico.
-De ocho meses a un
a–o de c‡rcel: a quien persiga o acorrale a una persona con fines sexuales.
Las penas se
incrementar’an en un tercio si el ofensor es reincidente, si las faltas las
comete m‡s de una persona o si la v’ctima es menor de edad, adulta mayor o
tiene una discapacidad.
Nielsen PŽrez,
congresista de Acci—n Ciudadana (PAC), afirm— sobre la resoluci—n: ÒEs muy
importante para las mujeres y ni–as que son las que sufren m‡s el acoso sexual
callejeroÓ.
ÒUna vez que recibamos
la notificaci—n por parte de la Sala, procederemos a enviar el texto a segundo
debate y que las mujeres de este pa’s no tengan que postergar m‡s sus derechosÓ,
a–adi—.
Por su parte, la
diputada verdiblanca Paola Valladares, una de las congresistas que firm— la
consulta facultativa, expres— su satisfacci—n sobre la la resoluci—n de la Sala
con respecto al proyecto.
ÒBusc‡bamos certeza
jur’dica con la que hoy contamos para avanzar, a pesar algunas dudas que
exist’an alrededor, sabemos que es un tema con el cual podemos seguir, y que en
el pa’s las mujeres lo requerimosÓ, indic—.