Sala III confirma sentencia de 40
a–os para cuatro hombres por asesinar a l’der narco limonense
Tribunal hab’a determinado que por perpetrar este homicidio se pagaron
cerca de ¢100 millones
Carlos Arguedas C.. Hace 17 horas
< ="A Dennis Patricio Omier Taylor, alias
Tupac lo asesinaron el 9 de octubre del 2015 en San Francisco de Dos R’os, San
JosŽ. El taxi en el que viajaba recibi— 72 balazos. Foto archivo de Alonso
Tenorio"/> A Dennis Patricio Omier Taylor, alias Tupac lo asesinaron el
9 de octubre del 2015 en San Francisco de Dos R’os, San JosŽ. El taxi en el que
viajaba recibi— 72 balazos. Foto archivo de Alonso Tenorio
La Sala Tercera de la Corte confirm— una sentencia de 40 a–os de prisi—n
para cuatro hombres, por planear y ejecutar el asesinato de Dennis Patricio
Omier Taylor, conocido como Tupac, y quien era considerado un l’der narco
limonense.
La decisi—n la tomaron los magistrados el pasado 5 de junio, cuando
rechazaron varios recursos de casaci—n y confirmaron la pena impuesta primero
por el Tribunal de Juicio de San JosŽ (6 de diciembre del 2018) y luego
ratificada por el Tribunal de Apelaci—n de Sentencia de Goicoechea (5 de
noviembre del 2019).
Los sentenciados en este caso son Jimmy AndrŽs Guzm‡n G—mez (36 a–os),
David Germaine Smith Chollette (36), Edwin Andrey Taylor Young (34) y Uriel
Augusto Urbina Obando (35).
La pena de 40 a–os fue por un delito de homicidio calificado y dos
tentativas de homicidio en perjuicio de una mujer de apellido Sawers y de un
taxista apellidado Corrales Angulo.
Asimismo, los magistrados ratificaron la absolutoria de un quinto
involucrado, de apellidos Thomas Stewart, de 33 a–os, por indubio pro reo,
manifest— su defensora Sandra Camacho.
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l’der narco limonense
El crimen de Dennis Patricio Omier fue perpetrado el 9 de octubre del
2015 en San Francisco de Dos R’os, San JosŽ, luego de que cuatros sujetos que
viajaban de un carro de color negro dispararon contra el taxi en el que viajaba
el fallecido, junto a su compa–era sentimental Sawers y el taxista Corrales.
Tupac recibi— 18 balazos en diferentes partes del cuerpo, pese a que los
gatilleros dispararon 91 veces con fusiles de asalto AK-47.
El d’a del crimen, Omier y Sawers hab’an abordaron el taxi para
dirigirse a un hospital privado ubicado en Escazœ, donde ella ten’a una cita de
seguimiento por una liposucci—n a la que se hab’a sometido.
La pareja sali— de la casa de una hermana de Omier, donde se hospedaban,
y fueron interceptados a 500 metros de distancia por cuatro sujetos que
atacaron a balazos el taxi.
< ="El 6 de diciembre del 2018 en el
Tribunal de Juicio de San JosŽ se hab’a dictado la sentencia en primera
instancia. Foto Jeffrey Zamora"/> El 6 de diciembre del 2018 en el
Tribunal de Juicio de San JosŽ se hab’a dictado la sentencia en primera
instancia. Foto Jeffrey Zamora
Pugna por drogas
Durante la investigaci—n policial de este homicidio las autoridades
judiciales verificaron que el crimen se debi— a una disputa por asuntos
relacionados con drogas.
Cuando el 6 de diciembre del 2018 se dict— la sentencia condenatoria a
los imputados, la jueza Isabel Porras Porras, presidenta del Tribunal de Juicio
de San JosŽ, dijo que, con fundamento en las pruebas aportadas durante el
debate, se hab’a comprobado que Tupac se dedicaba a una actividad delictiva en
la zona de Lim—n.
Se–al— que el d’a de su muerte, se decomis— una cantidad importante de
dinero en efectivo, tanto en d—lares como en colones, y un kilo de coca’na en
la casa de la hermana del fallecido, donde este se estaba quedando.
La jurista destac— que, pese al v’nculo de Omier con actos il’citos, eso
no le da autorizaci—n a ninguna otra persona o banda para acabar con una vida
humana.
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especial para liquidar a l’der narco
Asimismo, el tribunal determin— que por ejecutar este asesinato se
pagaron cerca de ¢100 millones, esto con base en las intervenciones
telef—nicas.
En este caso, la cojueza Mariela Villalobos hab’a explicado que este
asesinado produjo un gran sentimiento de inseguridad tanto en San Francisco de Dos
R’os como en el pa’s.
ÒClaramente existi— un da–o adicional. Seis viviendas de ese residencial
y tres veh’culos fueron impactados de bala (...). Adem‡s, hubo un impacto
social enorme y una falta de tranquilidad marcada por estos hechos que
generaron temor en la ciudadan’a y vecinos de la zonaÓ, expres— en aquel
momento Villalobos.