Viernes 7 de junio de 2019
Nacionales
Avalan crear unidad especializada en OIJ
Pero no le dan
presupuesto
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) creará una
unidad especializada en corrupción, pero trabajarán con las uñas porque no hay presupuesto.
“La regla fiscal no puede romperse y tiene que acogerse a
lo que estableció el Ministerio de Hacienda”, indicó Walter Espinoza, director
del OIJ.
Este comentó que lo que quite de un lado va a hacer falta
del otro debido a las limitaciones presupuestarias.
La idea es mover personal de un lado para esta nueva
unidad, es decir, se pasaría de 11 agentes de investigación a 15 o 18, según
Espinoza. Para agosto próximo esperan tener un grupo más robusto.
El funcionario manifestó que necesitan sobre todo mayor
apoyo en la parte informática y pericial.
“Recibimos apoyo de la Corte para lograr una estructura,
un grupo de trabajo para atender de manera exclusiva la corrupción. No se
pueden crear nuevas plazas, sino que vamos a fortalecer el equipo de trabajo
con una reubicación de personal”, señaló.
Recordó que hoy tienen auditores y especialistas en
finanzas atendiendo la parte patrimonial, pero necesitan más personal en la
parte de indagatorias.
Espinoza dijo que están conscientes de que se requiere
más agilidad en estos casos y que necesitan meterle más el hombro al Ministerio
Público.
Sin embargo, para ser más veloces necesitan de este
impulso y profundizar en áreas como la informática, transacciones financieras y
rastreos digitales, que son característicos hoy de este tipo de
delincuencia.
Tratarán de que esta unidad funcione cerca y si tienen
que trabajar un poco menos cómodos, lo harán, dijo Espinoza.
El funcionario reconoció que los casos de corrupción
vienen en aumento y que la nueva Ley que sancionará el soborno internacional
puede acarrearles mayor trabajo.
“Hubo un recorte en el presupuesto del año pasado y este,
pero estamos recibiendo apoyo de órganos administrativos y de la Corte Plena
para crear esta unidad”, recalcó.
El presupuesto del OIJ ronda los ¢100 mil millones, de
los cuales ¢82 mil millones se van en salarios. En este momento, manejan unos
100 asuntos complejos.