Jueves
31 DE MAYO DEL 2012
Amy Ross A. e Irene Vizca’no amy.ross@nacion.com 12:00
a.m.
31/05/2012
El
Servicio Civil deber‡ aplicar pruebas de conocimiento a todos los oferentes en
los concursos pœblicos que realiza, segœn un fallo de la Sala Constitucional,
dado a conocer ayer.
La sentencia le da a la instituci—n un a–o para comenzar
a evaluar aspectos de razonamiento verbal, numŽrico, as’ como conocimientos
cient’ficos relacionados con el ‡mbito en el cual se va a desempe–ar el
profesional.
Adem‡s,
la Sala indic— que el valor de las pruebas psicomŽtricas no podr‡ exceder el
50% del total de la calificaci—n.
JosŽ
Joaqu’n Arguedas, director del Servicio Civil, manifest— su alarma ante el
pronunciamiento que calific— de ÒpatŽticoÓ, ÒdescabelladoÓ e ÒimposibleÓ.
Como
ejemplo, el jerarca indic— que m‡s de 40.000 personas participaron en el
concurso docente en marzo y que tardar’an a–os en hacerles ex‡menes a cada una.
ÒSi
tenemos que hacer pruebas especializadas, Àd—nde quedan las universidades y los
colegios profesionales? Est‡ bien desconfiar, pero no tantoÓ, dijo Arguedas.
Asimismo,
opin— que se trata de una situaci—n de coadministraci—n por parte de la Sala
pues pretende decirle a la instituci—n c—mo seleccionar a los funcionarios
pœblicos.
ÒEsto
es algo absolutamente tŽcnico, para lo que tenemos profesionales de todo tipo,
desde administradores de recursos humanos, hasta psic—logos e ingenieros
industrialesÓ, se–al— Arguedas.
El
funcionario reconoci— que no tiene Òla menor ideaÓ de c—mo dar‡ cumplimiento al
fallo. ÒVa a ser un embarrijo tan grande que lo que
va a quedar es nombrar interinos y esperar que los concursos salgan en 10 a–os.
Empantana de manera brutal al Servicio CivilÓ, concluy—.
Razonamiento.
Los magistrados fundamentaron su
decisi—n en la necesidad de calificar el mŽrito y la capacidad de los
oferentes, segœn el principio de idoneidad.
ÒResulta
imposible aspirar al buen funcionamiento de los servicios pœblicos, si el
recurso humano de la Administraci—n no posee el conocimiento cient’fico y nivel
de razonamiento requeridos para el desempe–o adecuado de su funci—nÓ, dijeron
los altos jueces.